El currículo implica procesos de selección, organización, distribución y transmisión del conocimiento, de los planes de estudio en una institución escolar.
El origen del currículo se remonta al siglo XVII donde las universidades organizaban los cursos de estudio en dos clases:
-Trivium (lógica, gramática y retórica)
-Quadivium (aritmética, geometría, astronomía y música)
Luego Comenio desarrolla una metodología donde establece que en los pasos formales de la enseñanza se enfatiza el papel de la pedagogía como instrucción.
En el siglo XIX el objetivo de la educación era formar al ciudadano, transformándose en una prioridad.
-Progreso dirigido a valores sociales y humanistas.
-Escolaridad, función necesaria del Estado.
Después Durkheim dice que es la generación adulta la que debe transmitir los conocimientos a los jóvenes para que estos continúen con la vida social.
En el siglo XX John Dewey sugiere que la escuela debe formar individuos capaces de pensar, reflexionar y actuar.
Entonces se considera a la educación como una herramienta de movilización social y se controlan los contenidos y métodos escolares así como la práctica docente.
En México el origen del currículo nace en los años 70 con los planes y programas de estudio principalmente de las universidades, donde se establecen objetivos conceptuales y conductuales que el individuos debe alcanzar.
En la propuesta de Glazma e Ibarrola los objetivos planteados van dirigidos a los cambios en los estudiantes como resultado del PEA, permitiendo también su evaluación.
Durante el sexenio de Luis Echeverría se proponían proyectos transformadores para la educación como el del Colegio de Ciencias y Humanidades donde el currículum se estructura por áreas disciplinares y con perspectiva a la escuela nueva, donde el alumno tenga mayor participación en su aprendizaje, pero también se centraron a la práctica profesional donde primero se debe hacer un análisis del contexto social laboral, detectar problemas, plantear un perfil profesional, estudio de mercado de trabajo, análisis de recursos de la institución, población estudiantil, planes y programas de estudio y evaluación curricular continua.
Por último no dejaban de lado la enseñanza de los valores así como de observar o analizar el trabajo en clase e institución.
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